By Joan Spínola -FOTORETOC-

By Joan Spínola -FOTORETOC-

Villa de Guadalcanal.- Dió el Sr. Rey D. Fernando a Guadalcanal a la Orden de Santiago , e las demás tierras de la conquista, e de entonces tomó por arma una teja o canal, e dos espadas a los lados como así hoy las usa.



jueves, 28 de enero de 2010

LA CONQUISTA DEL PUEBLO JUMANO



UN CAPITULO DE LA VIDA DE JUAN DE OÑATE

…Aquel invierno del año 1626, Gikha sabía que el final de sus días se acercaba, ya no percibía el olor de la arena del desierto, no veía partir a los guerreros de su orgulloso pueblo a las praderas mas allá del Gran Cañón para cazar bisontes y alimentar al resto de la gran tribu, sus desgastados ojos por el polvo del desierto y quemados por las tormentas de arena solo percibían un hilo de luz lo suficiente para diferenciar los días de las noches.
El orgulloso Gikha fue durante treinta y cinco ciclos de invierno jefe del Clan del Maíz, perteneciente a la tribu de los Jumanos que habitaban en la tierra bautizada por los invasores como Gran Quivira, en Nuevo México, su edad avanzada le había hecho tomar la decisión convocar al resto de lideres del clan para nombrar un nuevo mentor, hacia ya mas de cien lunas que su salud se deterioraba y la llamada del espíritu del desierto era cada vez mas insistente.
Gikha reunió a los diez jóvenes representantes de los clanes y tribus que ocupaban la amplia zona de tierra que se extendía desde el río Grande hasta el río Conchos en la enorme Kiva que ocupaba la parte central del asentamiento, para transmitirles sus últimas enseñanzas, convocar a sus antepasados y nombrar al mas apropiado para asumir la responsabilidad de los difíciles tiempos que se avecinaban.
Una vez acomodados en el gran recinto de paredes de piedras simétricas y suelo cubierto de pieles de bisontes y otros animales, el anciano comenzó a hablar e invocar a los espíritus con voz pausada y enérgica a pesar de su edad.
…Ya en la quinta luna desde que se aislaron en aquella gran Kiva en la que solo tenian contacto con el exterior a través de una pequeña hendidura, por donde las mujeres le suministraban agua, zumos alucinógenos de raíces, mazorcas de maíz, semillas de tunas y churotes y otros alimentos producidos por la tierra, cuando el agotamiento y el cansancio hacia mella en todos los asistentes, el gran guerrero tomo la palabra por última vez para contar la cruel historia que mermó su pueblo en tres terceras partes y que tal vez se aproximaba nuevamente:
Hace casi treinta inviernos (entre los años 1598 y 1601 de nuestra era), unos hombres de piel muy clara que cubrían sus cuerpos con unas armaduras semejantes a las corazas de las tortugas que los hacían invulnerables a nuestras flechas y que escupían fuego por unos diabólicos objetos que llamaban arcabuces, llegaron a nuestras tierras cabalgando a lomos de sus caballos causando gran dolor a nuestro orgulloso pueblo, matando a nuestros guerreros, quemando nuestras chozas y cosechas, matando nuestros animales, secuestrando a nuestras mujeres y envenenado nuestros pozos, todo ello en nombre de su Dios y en busca del oro del que carecía nuestra tierra.
…Uno de sus jefes era Juan de Oñate, nombre que jamás se debe pronunciar en nuestra lengua, yo me enfrenté a él en una lucha a muerte, finalmente los dos nos indultamos, le hice comprender que en esta tierra jamás encontraría oro y le regalé otros presentes para que abandonaran nuestras tierras, él me dio este amuleto de madera que ellos llamaban cruz y me dijo que en el final de nuestros días unos hombres vestidos con sencillas túnicas vendrían nuevamente, pero esta vez solo traerían la palabra de su Dios y que a partir de esa fecha sería también el nuestro.
…Finalmente, salieron de la Kiva el día de la octava luna, cuando un gran jolgorio y griterío de niños y mujeres recibían a un grupo de monjes encabezados por los frailes Juan de Salas y Diego López , que se establecieron en la zona, predicaron y bautizaron aquella y otras tribus.

Gikha una vez cumplida su misión, abandonó la tribu en dirección al Gran Cañón, muriendo a penas a unos mil quinientos pasos del poblado, aquella misma noche a miles de kilómetros, en una villa llamada Guadalcanal (España), murió en extraña circunstancias el indiano Juan de Oñate.

Extracto traducido del capitulo XXI del libro ”THE CONQUEST IN GOD´S NAME” (La conquista en nombre de Dios) de la escritora Emily Graham.

Rafael Candelario Repisa

lunes, 25 de enero de 2010

AÑORANZAS DE UNA FERIA



GUADALCANAL 1901
(*)
Sí, el tiempo parece estar detenido aquí, en el inolvidable Coso de nuestro querido Pueblo. Pienso que esta fotografía, para todos nosotros, evocará unos recuerdos amorosos y unas añoranzas no pequeñas. Es una tarde de Feria de 1901, como tantas otras. Es una Feria más, pero de hace setenta y un año. Una Feria más, que hoy todos contemplamos gracias a la mirada indiscreta que dejó impresa para siempre en este plano, una antigua máquina de fotografías.
Por la pasividad que denota el Real de la Feria, saco en conclusión que es una hora avanzada de la tarde, en la cual casi todo el personal está retirado a descansar, algunos, quizás durmiendo una relajada siesta, para luego volver a llenar con su bullicio y alegría todos los Paseos y Casetas del Ferial.
En la parte superior de uno de los Paseos, podemos apreciar dos “Tío Vivo” de los llamados “Caballitos", uno de ellos con las lonas echadas, quizás esperando que se las quiten para empezar su rutinario trabajo, que con sus gritos y vueltas llenarán de gozo y alegría a los pequeños. Un poco más abajo en sentido vertical, vemos cinco Casetas de recreo, con la línea majestuosa y el salero que siempre puso Guadalcanal en estas Fiestas. Frente a ellas, unos puestos de juguetes y bisuterías. Sobre la parte izquierda de la fotografía, las Cantinas llamadas “del rodeo”, donde calés y payos hacían sus tratos. Hacia el Centro de la misma apreciamos el “Tabalao” donde por la noche la banda del Pueblo interpretaba compases y pasodobles que alegraban el ambiente del recinto. Y en línea con él vertiendo su cristalina agua serrana en el largo pilar y abrevadero del ganado: la Fuente, construida ya en el sigo XIX para que más tarde, en el año 1944, fuera derruida y construida de nievo por el regidor Gómez del Valle, en el sitio que hoy ocupa en la actualidad.
Algunos de nosotros, antes de ver esta fotografía, quizá nos hubiéramos imaginado el Coso, no como está hoy, pero tampoco como esta fotografía nos lo muestra. Pues no, el Coso de nuestros días, no es ni un asomo al de aquellos años, donde no existía carretera, los árboles recién plantados no les daban la “vista” y alegría de la cual hoy podemos disfrutar. Fue un año después, en el 1902, cuando Guadalcanal pudo disfrutar, por primera vez, de alumbrado producido por energía eléctrica. Era una dínamo traída por Ignacio Vázquez en dicho año.
El Coso de hoy es como un pedazo de tierra Babilónica o Limbiana, que, cuando lo pisamos, nos hace sentir optimistas y estar orgullosos de haber nacido en una tierra como esta. Y como dijo una vez, nuestro convecino y amigo, don José F. Titos Alfaro: “!Ah¡ el Coso es una de las muchas cosas que tiene Guadalcanal que no tiene el mundo entero. Foco de alegría atrayente e inmantado, balcón de este bonito Pueblo Serrano, que nos hace pensar en él como una rosa inmarcesible”.
Después de esta pequeña definición y apuntes de los que era la Feria de Guadalcanal, allá por los años citados, hoy vemos y contemplamos esta fotografía y rápidamente nuestro pensamiento vuela al Coso a recordar las Ferias más modernizadas y mejor alumbradas de hoy, donde no hay rincón del mismo que la electricidad no haga acto de presencia. Pero no más alegres que las de aquellos años de principios de siglo, donde la alegría se desbordaba por las Casetas y por todo el recinto (como se pueda desbordar hoy), con la gracia y simpatía que Guadalcanal guarda dentro de sí para con estas ocasiones.
Las Ferias se hicieron para la compra y venta de ganado y en ello radica. Las nuevas generaciones, sin embargo, no pensamos así, ya que sólo hacemos con gratos recuerdos de alegría, optimismo y diversión. Dándole al espíritu en estos días una paz y relajamiento que quizá no encontremos en otras fechas más propicias.
En estos días, donde Guadalcanal vive el esplendor de sus Fiestas Patronales como ya es costumbre, se saca en ordenada y solemne procesión a Nuestra Santísima Virgen de Guaditoca, haciendo acto de presencia en el Real de la Feria, bajo el júbilo y clamor de todos y el estruendo de unas tracas de artificios en honor a Nuestra Santa Madre. Algunos admirando a la Virginal y Serrana figura de Nuestra Patrona, pensamos y rehusamos la idea de pensar, en lo que dijo Teófilo Gautier, de que “Nacer es comenzar a morir”, o pensar en las máximas de Gracián. ¿Cuál puede ser la vida que comienza, entre los gritos de la madre que la da y los lloros del hijo que la recibe?
No, amigo lector, no son en las máximas de “Gautier” o de “Gracián” en lo que nosotros pensamos, sino en todo lo contrario. En estos días de esplendor y Fiestas, alegrándonos de vivir y olvidándonos del trabajo rutinario de la vida cotidiana, del quehacer y de toda clase de preocupaciones, para volvernos alegres y optimistas, que despierta la envidia y admiración de todo aquel que nos visita.
Pienso que de estas Fiestas de nuestros días, a las de aquellos años, va un intervalo de tiempo bastante grande. Es como si “éstas” y “aquéllas” con estos recuerdos que, como ya he dicho, todos añoramos con nostalgia, estuvieran unidas por un gran istmo que uniera dos penínsulas. Un gran istmo, que se irá haciendo mayor, que se irá alargando con el tiempo y el paso de los años, pero que nunca se borrará de nuestras mentes mientras haya gente delicada y responsable que guarde estos bonitos, y preciados recuerdos que son las fotografías antiguas.
Y he aquí, mis queridos paisanos, esta bella comunión, de unos recuerdos lleno de nostalgia, de las alegrías y anhelos de nuestros pasados, plasmada en esta instantánea, con el amor y el recuerdo de sus hijos de hoy que hacen estremecer sus corazones, como antes la bellísimas comunicación de un beso paternal o filial.

JOSÉ BAÑOS CARMONA
REVISTA DE FERIA 1972

(*) La foto que ilustra esta entrada no pertenece al articulo original, si corresponde a la fecha aproximada.

jueves, 21 de enero de 2010

MIS VIVENCIAS





Desde el corazón

Alguien muy especial me ha pedido que escriba mis vivencias infantiles en Guadalcanal, yo no me animaba demasiado por miedo a desnudar mi alma, pero acabo de decidirme y me dispongo a escribir, ciertamente es que no se lo que va a salir de mis dedos, pero supongo que algo será, creo que no me debo extender mucho para no cansar y la verdad eso es algo a lo que me cuesta adaptarme, pero lo intentaré.

Bueno vine al mundo un 17 de junio del taitantos, en el seno de una familia sencilla pero trabajadora, con unos padres y unos tíos adorables que me hicieron la vida todo lo fácil que estaba en sus manos, a pesar de las carencias lógicas de la época, soy la mas pequeña de dos hermana, la mas pequeña de cuatro primas por una parte y la penúltima por la otra, o sea, que fui algo mimada, recuerdo haber tenido una infancia entrañable, fui una niña súper feliz, además de ser la niña con mas motes del universo y todos cariñosos, así transcurría mi infancia hasta que mi padre decidió que en el pueblo no había futuro para sus hijas, el futuro que veía para nosotras era sirviéndoles a las cuatro ricachonas y solo de pensarlo aun veo la mala cara que se le ponía, por eso tomó la decisión de emigrar a Madrid, ciudad a la que adoraba y conocía al dedillo por circunstancias que son tristes y no vienen a cuento.

Recuerdos... En aquel momento mi vida cambió, faltaba de mi lado mi padre y le echaba mucho de menos, fueron seis meses sin verlo que se me hicieron 6 años, cuando nos mandó a llamar aun fue mas triste, se me mezclaban las ganas de estar con él con la desgana de dejar al resto de mi familia, eso ocurría cuando tenia solo siete años y ahora desde mi edad adulta se me hace mentira que mi mente tan pequeña pudiera cavilar tanto y mi corazón sentir tantas emociones y miedos.

Nostalgias… Dejaba atrás muchas cosas y tenía algo muy claro: que no me quería ir de mi casa, de mi convento, del lado de mi familia, mis amigas, mis compañeras… Yo lloraba cuando no me veían, para que nadie padeciera por mi sufrimiento, no lo hice hasta que pasando el túnel ya en el tren me agarre a la cintura de mi prima, que junto con una de mis tías nos acompañaron hasta Llerena y mi tío hasta Mérida, para hacer el trasbordo, ya que mi madre nos llevaba a mi hermana, a nuestro abuelo, muy viejito y a mí, junto con nuestro baúl repleto de interrogantes y lo poco que teníamos, en ese momento me puse a llorar desconsoladamente y todos me miraban, creo que divertidos pues pensaban que me daba miedo semejante túnel, era la primera vez que salía del pueblo, yo deje que creyeran eso.

Añoranzas … Dejaba atrás toda mi vida, todo lo que yo quería… el convento, en el que tanto me costó ingresar, ya que desde los tres años intentaron que entrara en el, pero se ve que en aquella pequeña clase de gratuitas no cabíamos tantas niñas, así que mi desolación era mayúscula cuando venia de vuelta para casa de la mano de mi tía, (mi madre no volvió nunca al convento desde el día que le pusieron unas orejas de burro por no saber la lección), con mi babi y la cartera de material marrón, recuerdo sus dos enormes hebillas, aquella cartera heredada de mis dos primas y mi hermana, por fin a los cinco años me admitieron, iba agarradita de mi hermana hasta llegar a mi clase, y me soltó allí en un banquito como si fuera un paquete, en aquel instante, me arrepentí de haber estado dos años penando por que llegara ese momento.

Nostalgia… Después la vida en el convento tampoco es que estuviera mal, me di cuenta de que estudiar me gustaba poco, pero me gustaba menos quedar en ridículo y hacia lo que podía; Allí empezaron a aflorar en mi pequeño corazón de una niña de cinco años los primeros sentimiento buenos y malos, el mas malo que sentí fue el del odio, me lo despertó una hermana del convento de cuyo nombre no quiero acordarme y que Dios la tengo en su gloria, yo la veía como un cuervo gigante, aun puedo oír como le chirreaban los zapatos y su paso era largo y enérgico, ese sentimiento me lo produjo cuando al estar en la fila para salir, divididas las pequeñas en un lado del patio y las mayores en otro, tuvo la brillante idea de que saliéramos por delante las pequeñas y mi hermana de su fila me cuchicheo que la esperara en la puerta y la muy... le tiro de las trenzas, yo en ese momento la odie y por ese mismo motivo también se me despertó el sentimiento del amor propio a mis seres queridos, en ese caso el amor a mi hermana.

Tristezas… También se me despertó el sentimiento de la envidia, nunca se me podrá olvidar donde las niñas pobres teníamos que hacer pis, en un gallinero mal oliente al que apenas me podía subir, oscuro y sucio, al que llamábamos “el cuartito”, aquello comparado con el W C que tenían las ricas justo a la vuelta de la esquina con sus azulejos sevillanos y lleno de luz era deprimente, cuando yo vi aquello por primera vez, me prometí dos cosas, que de mayor tendría uno igual y que en cuanto no me viera nadie yo haría mi pis allí, cosa que logre en una ocasión, (esta claro que estaba totalmente prohibido); Un día pedí permiso para ir “al cuartito”, estaba sola, no había nadie a la vista, me armé de valor y... ¡zas!, allí me colé, pero cual no seria mi sorpresa que de los nervios o el miedo a que llegara la citada hermana, hice algo peor, ¡horror!, cuando salí corriendo de allí... llegue a mi pupitre y comprobé que nadie se había enterado, me sentí satisfecha y !súper mala!, por fin había hecho realidad mi primer deseo ¡y con creces! Cuando llegaba la hora del Ángelus teníamos que rezar todos los día y también cantar el Cara al Sol con el brazo al frente, cuando lo contaba en casa, nadie decía nada, pero mi padre por lo bajini me decía: tu no cantes eso, yo no entendía por que, pero le hacia caso ciegamente, plantaba mi mano al frente y no cantaba, bueno pues un buen día por ello me lleve un buen sopapo por la Chari, se lo dije a mi padre y me dijo: bueno pues mueve solo la boca y se reía, yo así lo hice, ya no me lleve mas sopapos y complací a mi padre.

Alusiones… La Chari era lo mejor del convento, era cariñosa con nosotras, pero fue la persona que me inspiró la ira en alguna ocasión, me dio con el puntero en la corva y eso no me gustaba, porque me dolía, claro. No tengo muchos mas recuerdos, solo fueron dos años, pero el que no se me olvidará nunca es el día que mi hermana y yo fuimos por ultima vez, me cogió La Chari en su regazo en un banco del patio de las pobres, con mucha pena diciendo que se le iban todas sus alumnas, por desgracia en aquella época esta escena se repetía demasiado a menudo, recuerdo a todas mis compañeras alrededor mirándome no se si con tristeza o con admiración ya que me iba a Madrid, yo me sentía la protagonista de aquello, no sabia si era bueno o malo, pero lo que si sabia es que para todas era muy triste.


Recuerdos… De mis amigas de la calle, los recuerdos que tengo son los normales de aquella época, jugar en verano en la calle cerca del Pilarito a las cosas típicas de las niñas y eso si, nuestras horas muertas a la sombrita de la torre con los niños de la calle Santa Ana molestándonos en ocasiones con nuestros cacharritos, las risas con Morente y sus chascarrillos, y las regañinas de su mujer Carmen cuando le manchábamos sus inmaculados portales, del invierno recuerdo el viento azotando mi cara y el frío metido en mis huesos, los impermeables tiesos y lo que disfrutaba metiéndome en los charcos con las katiuskas que se le quedaban pequeñas a mi hermana.


Añoranzas… El ir y venir de la mano de mi madre de la calle Santa Ana a la calle Fo (ahora Cervantes), la de mis abuelos todos los días, el entrar y salir a la casa de mis tíos de la calle Minas y de la Plaza de Santa Ana, el jugar a las cartas en la mesa camilla con mi abuela y todos mis primos, añoranzas de cuando mi primo el mayor nos subía a mi prima y a mí a un carro que creo que fabricaría él, no me acuerdo, pero si me acuerdo las veces que nos volcó y lo gritos de mi abuela al vernos en el suelo, la risa callada de mi abuelo y la escandalosa de mi tío abuelo, añoranzas de las noches que dormíamos todos en casa de abuela cuando las madres estaban en la aceituna y nos daba "el suministro", que era aguardiente aguado de una garrafita, creo que mi abuela era muy lista así se aseguraba de que todos durmiéramos relajados, todo era muy bonito.


Ay sueños que podemos lograr, sueños que podemos hacer realidad, pero el único sueño que no podemos cumplir es volver al pasado, pero está bien que ahondemos en nuestro interior para sacar recuerdos perdidos.

Toñi Muñoz

miércoles, 20 de enero de 2010

PENSAMIENTO LÚDICO



ALGO MAS QUE NOTICIAS

Escribo estas líneas cuando las noticias que llegan de Haití son cada vez más estremecedoras. El terremoto que ha sufrido este paupérrimo país ha provocado, según los cálculos que las propias autoridades haitianas nos han transmitido, más de ciento cincuenta mil muertos, especialmente en la capital, Puerto Príncipe.El terremoto ha tenido su epicentro, con una precisión geológica catastrófica, precisamente en la capital, donde vive casi la mitad de la población de todo el país. Nada parece haberse escapado, ni edificios sólidamente construidos ni chabolas, pero indudablemente los más pobres han sufrido –como siempre- mucho más los efectos devastadores. A nuestro dolor se une una sensación de remordimiento, porque permitimos que haya países en circunstancias miserables y constantes como Haití.Hay quien piensa que los habitantes del primer mundo tenemos cierta capacidad para comprender y sufrir por los demás, porque nuestro trabajo incluye informar u opinar sobre desgracias y miserias de la humanidad. No comparto esa opinión, o al menos me resisto a aceptarla.Del mismo modo que los médicos no son impasibles ante el dolor de los pacientes, sino que precisamente el dolor y el sufrimiento les lleva a esmerarse y profundizar en el estudio y el tratamiento de las enfermedades. Un buen médico es quien ve en su tarea un modo eficaz y concreto de aliviar el dolor, la enfermedad, se esmera en su capacitación permanente. Pues, del mismo modo, el resto de los humanos o debemos ser impasibles ante el sufrimiento, debemos reaccionar e intentar contribuir a paliarlo con nuestra ayuda material, a la vez que sacar lecciones para exigir a nuestros gobiernos que actúen inmediatamente en estos focos de pobreza y desesperación.El caos y la muerte se están cebando en Haití. Cualquier persona con un poco de sensibilidad está horrorizada al ver las imágenes por televisión de las dimensiones de la catástrofe. Pero no debemos quedarnos paralizados: todos lloramos, todos debemos ayudar ahora y en un futuro a Haití y el resto de países de los llamados “desheredados”, cada uno como pueda, Y repito, exigir a nuestros gobiernos que se pongan a trabajar.
La miseria de este país, la carencia de infraestructuras, la insuficiencia hospitalaria, se han puesto ahora más de relieve. Nos duele que ahora caigamos en la cuenta de tanta miseria, pero hemos de traducir los lloros en ayudar ahora a ese país y en sacar la consecuencia de que no puede haber países en el olvido de la miseria, de los que nos acordamos cuando suceden grandes catástrofes. Ahora urge la reacción inmediata, la que han propiciado las instituciones internaciones, gobiernos y ONG: apertura de cuentas corrientes, envío de personas y equipos…casi de todo tienen ahora necesidad urgente en Haití. Aquí hablamos y sufrimos la crisis económica, pero los haitianos siempre han vivido en la miseria. Tal vez ayudando a Haití aprendamos mucho más sobre nuestra situación, dejemos un poco de mirarnos el ombligo y ese esfuerzo por Haití también contribuya a reconocer nuestros verdaderos problemas, que no tienen una raíz económica, sino de egoísmo materialista. Ahora urge reaccionar y ayudar a Haití. Es el comienzo para aprender algo para el futuro.

RAFAEL CANDELARIO REPISA

lunes, 18 de enero de 2010

DR. PEDRO VALLINA




GALERÍA DE GUADALCANALENSES ILUSTRES





Muchos y muy famosos paisanos en distintas facetas sociales ha dado nuestra villa para la historia, pero quizás uno de los menos conocidos, es el Dr. Pedro Vallina, anarquista, médico, humanista y escritor, que nació en Guadalcanal (Sevilla) en el año 1879 y murió en Veracruz (México) en el año 1970.
Debido a mi colaboración den el Diario de Teruel, al recabar datos para un articulo sobre los médico en la política española de la I República, profundizo en la trayectoria Política y humana del Dr., Vallina.
Cuenta en sus memorias que nació y vivió sus primeros años en Guadalcanal; Su padre era de origen Asturiano, propietario de una confitería en Guadalcanal y que amasó una pequeña fortuna, comprando con ella varias fincas con olivares, naranjos y frutales e incluso una pequeña huerta, con el objeto principal de dar trabajo a los menos favorecidos de nuestro pueblo; Su madre era de Cantillana, andaluza, guapa y con un carácter totalmente distinto a la sobriedad de un montañés Asturiano emprendedor, que llegó a Sevilla siendo muy joven a mediados del siglo XIX, andando desde su Asturias natal con un grupo de amigos para buscar fortuna.

Siendo conocido el Dr. Vallina principalmente por su trayectoria política, no quisiera profundizar sobre esta faceta, sino en la que para mí es más importante, es decir, su carácter social y humano que después de leer su autobiografía y el prologo de su primera obra “MIS MEMORIAS” escrito por Paulino Díez, le definen como un personaje antes que político, con un profundo sentido humano y comprometido con las tendencias sociales de su época.
Por su profesión, un buen médico colaborador en multitud de proyectos de investigación y trabajos en hospitales de varios países, ya que sus continuos exilios le llevaron a trabajar fuera de España durante periodos mas prolongados que en su propio país; Pudo tener una posición acomodada, pero su carácter humanitario le hizo vivir en varias etapas de su vida al borde de la pobreza, cuenta su prologuista
que despreocupaba su supervivencia hasta el extremo que su familia había días que no comían mas que una vez y gracias a la generosidad de sus vecinos”, pocos ingresos podían proporcionarle la clientela que tenía en aquella época en su consulta, principalmente de la campiña sevillana de donde acudían los campesinos, “algunos como pago de su visita, traían un pollo, huevos o cualquier otra cosa, que entraban por un lado y salían en manos de un necesitado por otro”.
Igualmente comenta que la escasa fortuna familiar recibida, la dedicó para contribuir a la construcción del Sanatorio Antituberculoso de Cantillana, pueblo natal de su familia materna, con el único condicionante
“que serán atendidos todos los enfermos sin tener la obligación de pagar si no tienen medios para ello”.Esta obra, a la que dedicó el Dr. Vallina todos sus esfuerzos y dineros, fue financiada en gran parte por los sindicatos y el pueblo de Cantillana, cuyos vecinos trabajaron desinteresadamente y contribuyeron con aportaciones económicas, así mismo, cabe destacar la suscripción popular que se hizo en el periódico “El Liberal” del que era director y amigo personal, D. José Laguillo.
Este sanatorio llegó a funcionar de manera admirable, y solidaría en los primeros años, pero luego fue abandonado y destrozado, cuando el Dr. Vallina fue encarcelado, deportado y apartado de su obra, primero por el gobierno de la República y finalmente por la dictadura de Primo de Rivera, el sanatorio fue en varias ocasiones saqueado, quemado y finalmente destruyeron todo lo que no ardía, cuando la demencia y sin razón de unos y otros, no respetaron este importante y necesario proyecto.
Por aquellas fechas era muy conocido en los círculos menos favorecidos de Sevilla y Cádiz, atendiendo a las necesitados a cualquier hora del día o de la noche, con el solo pago de la amistad y las largas charlas sobre política y desigualdad, llevaba su forma de entender y practicar la medicina hasta sus últimas consecuencias “llegando a acompañar a los enfermos hasta los últimos momentos, no abandonando la casa del finado hasta limpiar, y desinfectar la habitación dende yacía con sus propias manos”.Era una persona especialmente crítica con la evaluación de los aconteceres de su época, descubrió entre otras, las causas de la insalubridad del agua en Sevilla, empezó una campaña contra las autoridades sanitarias, denunciando el alto índice de tuberculosos en la ciudad, por el abandono de limpieza y salubridad que sufrían los barrios marginales, llegando a provocar una huelga de inquilinos por el abandono de las viviendas, fue censor visceral y a veces despiadado con el poder establecido y con la Iglesia, con las consiguientes consecuencias políticas de marginación pública y continuos exilios.
Otra referencia encontrada sobre la vida del Dr. Vallina, aparece publicada en el libro “De la Estepa Extremeña a La Rioja Argentina”, escrita por el profesor Téllez Manrique, nacido en Fuenlabrada de los Montes (Badajoz) en el 1910 y exiliado en Argentina.
Este profesor en un capítulo de su libro describe: “…al camarada Vallina le conocí en mi adolescencia, allá por tierras extremeñas, pues en Fuenlabrada de los Montes y los pueblos de la comarca pasaba largas temporadas de exilios.Se preocupó de organizar a los campesinos frente a la dictadura oligarca de los santones del pueblo, haciéndose muy popular entre las gentes sencillas, pero sobre todo, antes que político fue médico, controlando las epidemias producidas por la triquinosis y el carbunco. Educando a aquella pobre gente para que enterraran los cadáveres de los animales y no sirvieran de alimento.
Recuerdo que un día trajo a pie por los caminos polvorientos desde Siruela, un pueblo que distaba más de 30 Km. del mío, unas treinta ovejas y cuatro cerdos que cambio por animales que padecían enfermedad para analizar su comportamiento frente a la misma.
Fue muy criticado por la Iglesia, pues los domingos organizaba cuadrillas de campesinos para hacer trabajos en común…”
Finalmente cabe resaltar su amistad con Blas Infante, tratando los temas agrarios, movimientos campesinos y haciendo emerger el movimiento que hoy se conoce como Cooperativas, su apoyo a la candidatura andalucista de Blas Infante, aún no compartiendo totalmente sus tesis y planteamientos, fue comprometida y arriesgada para su prestigio entre los cenetistas, que no compartían por entonces las formas electoralistas.Esta amistad hacia que Blas Infante le defendiese de todos sus detractores e incluso llegó a pronunciar una frase en una tertulia, “es preciso concluir de una vez para siempre con la leyenda del “Tigre” como los privilegiados llamaban a Pedro Vallina” cuando se comentaba la afinidad del doctor con las “dinamiteros”, su amigo y discípulo Antonio Rosado dice en sus memorias que “no fue nunca amigo ni vio con buenos ojos… a los partidistas dinamiteros”, a pesar que en sus tiempos de juventud fabricaba bombas en París para los Movimientos Revolucionarios en España.
De nuestro ilustre paisano Adelardo López de Ayala, en una tertulia en París en la que entre otros se encontraban, Gravé, Harvey y Coussenel, al ser preguntada por éste comentó. “… Era buen escritor, pero aquel pequeño aprendiz de político de enorme cabeza, era de Guadalcanal, sólo para la historia, vivió y pensó como extremeño presentándose por la mitad de sus municipios para conseguir sus objetivos, como político fue un conspirador, que se atrevió a medrar con liberales, progresistas, monárquicos, republicanos…, en fin un figurón…”Leyendo sus memorias, quizás lo menos positivo para un Guadalcanalense como yo, es el capítulo de su biografía que describe al pueblo y personajes que conoció en su infancia y primeros años de juventud, de una forma ácida y anodina, al hablar de sus vecinos y costumbres de una forma peculiar, que no comparten otros autores de la época, y que sólo los más ancianos del pueblo, pueden dar fe o negar éstos comentarios.
El personal en su mayoría valía poco o no aspiraba a otra cosa que vegetar. La propiedad de la tierra estaba en manos de unos pocos, los más malos y brutos.
Los ricos holgazanes pasaban el día en el casino, hablando de tonterías; los artesanos, las noches en las tabernas, y los pobres jornaleros sin tierra ni pan, vivían miserablemente, ganando una peseta cuando encontraban trabajo.
Había un pequeño grupo de montañeses llegados de fuera, como mi padre, más civilizados, de ideas libres y que se dedicaban al comercio.
Las mujeres de los ricos hablaban como cotorras, se visitaban entre ellas y organizaban fiestas religiosas, bailes y corridas de toros, pero las mujeres de los pobres, servían de criadas y lavanderas y en la cogida de la aceituna ganaban cincuenta céntimos, escasamente para una mala comida.
En aquel ambiente monótono, las fiestas anuales eran esperadas con impaciencia. La mas”distraída” era la Semana Santa, en la que salían varios pasos, caricaturas de los de Sevilla, se hacían cosas a lo vivo, a “Judas” se le perseguía y se le apedreaba, escapando vivo por la ligereza de sus pies; Se detenía a un viejo mendigo, se le encerraba en un calabozo y al día siguiente un cura le lavaba los pies.
Una buena moza, que gritaba fuerte, hacia de Verónica y en la plaza pública cantaba y limpiaba las lágrimas de la Virgen, pero sobre todo, el sermón de las cuatro horas era imponente. Se traía a un predicador de fama y todas las damas acudían emocionadas con sus mejores atavíos a escuchar su “santa” palabra.
Se bebía mucho aguardiente y se comían ricos dulces preparados con miel de la sierra.No salía mejor parado el poder establecido, cuando en otros de sus párrafos comenta:
El Ayuntamiento no era nombrado por el pueblo sino por el cacique, que escogía los más pillos y se quedaban con los ingresos municipales, faltando la luz y el empedrado.El Juzgado Municipal era una cosa por el estilo; el juez sólo atendía a los más influyentes.
Pero lo que allí estaba en su puesto era el cuartel de la guardia civil, para proteger a los ricos y atemorizar a los pobres con sus procedimientos crueles.”.
De la Iglesia prefiero obviar sus comentarios, ya que en él se citan personajes que no he conocido, y al no encontrar bibliografía sobre ellos, no puedo verificar sus nombres y situaciones, simplemente como reseña, dice de un cura del pueblo que conoció en su adolescencia, “que cuando estalló la revolución popular el cura principal que había ejercido una influencia perniciosa en el pueblo, fue fusilado dos veces. La primera se quedó mal herido y a la mañana siguiente lo encontraron con vida, sentado sobre una tumba y rezando, y fue fusilado definitivamente, éste cura había equivocado el camino de la vida y en vez de seguir la doctrina de Cristo, que le hubiera hecho un hombre feliz, siguió la del demonio que le llevó al infierno”.El Doctor Vallina participa activamente como Alférez Médico de Sanidad en la Guerra Civil Española, en varios frentes de Castilla, Valencia y Cataluña, pero cuando cayó la resistencia de Cataluña se exilió en Francia.
Allí a pesar de que había pasado parte de su juventud y tenía bueno amigos, su pasado de revolucionario le hizo sentirse perseguido y evacuado en el vapor de La Salle camino de Santo Domingo, finalmente se estableció México, lejos de la metrópoli, pasó sus último veinte años en el pueblo de Puerta Bonita del Estado de Oaxaca, que debido a su clima tropical padecían su población grandes problemas con el paludismo.
La mayoría de ésta población eran de origen indio y muy pobres, así que nuevamente pasó por problemas económicos, ejerció hasta los últimos años de su vida, finalmente enfermo y con avanzada edad accedió a ser trasladado a la Ciudad de Veracruz, donde falleció el 14 de febrero de 1970, a los 91 años de edad, rodeado de apenas una decena de amigos y añorando su patria.
Opinión.

No es mi intención resaltar lo positivo o negativo del Dr. Vallina en éste artículo, quizás pueda parecer así si sólo se lee una pequeña parte de su vida, creo que para conocerlo realmente y para juzgarlo es necesario analizar su obra autobiográfica y el resto de publicaciones editadas por él y sobre él.
Cómo reflexión quiero terminar un aforismo de nuestra paisana Ramona Yanes,biUn hombre bueno es el que se abstiene de hacer mal, un hombre malo es el que se abstiene de hacer bien”, y un proverbio chino dice “al final de los días de nuestra vida seremos juzgados por nuestros hechos en una balanza, si ésta se inclina hacia el mal, que mal, si se inclina hacia el bien, que bien, ¿cuál será mi inclinación cuando me muera?”

Bibliografía

“Mis Memorias” del Dr. Pedro Vallina, reeditado por el Centro Andaluz del Libro en el año 2000.
“De la Estepa Extremeña a la Rioja Argentina” del Profesor Téllez Manrique, editado por Editores Mexicanos, México DF 1971
Prólogo de sus memorias de Paulino Díez, Editora Colón 1967
Archivos sobre la clase médica en la I y II República Española, del Centro de Estudios Turolense.


Rafael Candelario Repisa

jueves, 14 de enero de 2010

FALLECE EL MARQUÉS DE GUADALCANAL



Fallece Antonio Fontán, el primer presidente del Senado de la democracia


Antonio Fontán Pérez, el primer presidente del Senado de la democracia, falleció hoy en Madrid a los 87 años de edad tras una larga enfermedad, según informaron fuentes de la Cámara Alta. La capilla ardiente será instalada este jueves en el colegio mayor Castilla de la Universidad Autónoma.
Filólogo, periodista y político, nació en Sevilla el 15 de octubre de 1923. Fue miembro del consejo privado de Don Juan hasta su disolución en 1975, senador por Sevilla y presidente de la Cámara Alta, nombrado por Adolfo Suárez en 1977. Posteriormente ocuparía la cartera de Administración Pública en 1979.
En 1945 inició su actividad docente como profesor ayudante en la Facultad de Filología y obtiene el título de doctor con una tesis de investigación sobre la tradición manuscrita de los Diálogos de Séneca.
En 1949 consigue por oposición la cátedra de Filología Latina en la Universidad de Granada e inicia estudios de Periodismo en la Escuela Oficial de Madrid. Funda la revista "La Actualidad Española", cuya dirección desempeña entre 1952 y 1956. En la misma época dirige también "Nuestro Tiempo". Pertenece a la Universidad de Navarra hasta 1967, dirigiendo su Instituto de Periodismo entre 1958 y 1962.
Colabora y más tarde dirige el diario "Madrid", convirtiéndolo en una avanzadilla de la democracia y del que fue último director.
Además, destacó su labor como filólogo e investigador, desempeñando su cátedra de Filología Latina en la Universidad Autónoma de Madrid entre 1972 y 1975, y en la Complutense a partir de 1976.

Fuentes, Europa Press


miércoles, 13 de enero de 2010

HOSPITAL DE NUESTRA SEÑORA DE LOS MILAGROS





TROZOS DE HISTORIA


Edificio con portada de principios del siglo XVI compuesta por vano de arco carpanel con arquivoltas decoradas y una hornacina sobre el alfiz que la enmarca.Se conjetura que su fundación pudo ser a finales del siglo XV. A finales del XVIII aún estaba en funcionamiento.En él estuvo instituida la llamada Escuela de Cristo y también radicó la Hermandad de la Veracruz.En este Hospital ocurrió un hecho que llenó de gran escándalo el pueblo de Guadalcanal. Este suceso está recogido en un documento que se conserva en el Archivo del Palacio Arzobispal de Sevilla.Corría el mes de marzo de 1575, Pedro Martín de la Rinconada, vecino de Guadalcanal y Mayordomo del Hospital de Ntra. Señora de los Milagros, presenta querella criminal ante el prior de la provincia de León de la Orden de Santiago, contra Miguel Rueda, Alguacil de la Gobernación de Llerena y un mulato llamado Domingo, criado suyo. Los hechos fueron los siguientes:“... el dicho alguacil y las demás personas, con temor de Dios Nuestro Señor y en desacato de la imagen de Ntra. Señora de los Milagros que está en dicha iglesia, el viernes próximo pasado diez y ocho de este mes de marzo, entró en dicha iglesia y la quebrantó, de la cual sacó y se llevó preso a Hernán González Caballero, vecino de esta villa, por cuyo efecto dio con la imagen de Ntra. Señora del altar abajo, en tal manera que le quebró dos de sus dedos de las manos y le hizo una señal en la cabeza que baja por el rostro y además de esto, partió y pisó el Niños Jesús y le quito a la dicha imagen la tocadura y le rompió una ropa de tafetán y le hicieron otros malos tratamientos, todo en desacato de la dicha imagen y a su iglesia, de lo cual por la gran devoción que en la dicha villa y en otras partes se le tiene a la dicha imagen e iglesia, de la villa y vecinos de ella se alborotaron y hubo sobre ello gran escándalo y alboroto. Por todo lo expuesto el Mayordomo pide que Miguel Rueda sea castigado para que sirva de ejemplo.El caso se le asigna al Teniente Vicario de Guadalcanal, Pedro Calderón. Este se encarga de interrogar a los testigos presentados para el caso a los que hace responder a seis preguntas, las mismas para todos, gracias a los cuales conocemos algo más sobre el suceso, la imagen y el Hospital.En el interrogatorio nos enteramos que el tal Hernando González huía de la justicia, representada por el dicho alguacil de la gobernación y Domingo, su criado mulato, refugiándose en la iglesia del Hospital en busca de inmunidad eclesiástica, la cual viola el alguacil al entrar en la iglesia a prenderlo. Hernando González, en vista de esto se refugia en la capilla de la Virgen, junto a su altar, donde espera que el alguacil no se atreva a entrar, pero se equivoca, éste entra con poca reverencia y respeto hacia ese lugar sagrado, agarrando al delincuente, que se resiste asiéndose a la imagen de la Virgen. El alguacil y el mulato tiran de él y entre los tres sacan a la Imagen de su altar estrellándola contra el suelo. El Niño Jesús se golpeó contra una cruz que había en el altar. Según los testimonios, los destrozos que sufrió la Virgen fueron los siguientes:-Hendidura en el rostro.-Quebrada y quitada la cabeza por los hombros.-Rotura de una ropa de tafetán negro guarnecida de terciopelo del mismo color, que se tasó en 12 ducados.Por estos testimonios también sabemos que la devoción a esta imagen era muy grande, que se le atribuían muchos milagros, y que ello contribuyó grandemente a la fama del Hospital, que se convirtió en importante lugar de devoción tanto en Guadalcanal como en su comarca. Decían que por este suceso se ha enturbiado en parte la dicha devoción y nunca más se ha dicho misa en la dicha capilla. La devoción a esta imagen llegó a América donde emigraron muchos guadalcanaleños y muchas personas que están y han venido de las Indias, los cuales por devoción que tienen a la dicha Virgen la han hecho donación de muchas cosas, así de cálices, lámparas y candeleros de plata y muchas ropas de mucho valor...Escuchados los testigos, visto y examinado el proceso, los autos y méritos presentados por las partes, el Provisor de la Provincia de León, el licenciado Diego de Valcazar, da su veredicto. Aunque en un principio pudiéramos pensar en la declaración de culpabilidad del reo y en un castigo ejemplar, la resolución es la que sigue:“Fallo por la culpa, que resuelta contra el dicho Miguel Rueda, usando de misericordia dejando a pie el rigor, lo debo condenar y condeno a 6000 maravedíes, los cuales aplico para el reparo de los daños de la imagen y ropa que tenía al tiempo que la derribó del altar, y por el desacato que cometió contra Ntra. Señora y su Santo Templo, mando que se haga una procesión de toda la Clerecía de la dicha villa, en un día de fiesta, que salga de dicho Hospital y vaya a la iglesia Mayor, en la que vaya el dicho Miguel de Rueda en cuerpo destocado con un hacha de cera que pese 4 libras en la mano, ardiendo, y oiga en la dicha Iglesia una misa cantada a la cual esté de pie sin humillarse arrimado a la primera grada del altar Mayor en medio de la capilla hasta el Preste diga Santo, que se hincará de rodillas hasta haber consumido y acabado la misa y ofrezca el hacha al cura para la iglesia y le bese la mano y dé de limosna 4 reales y tome testimonio de cómo así lo cumplió y lo traiga a esta Audiencia. Condeno de más en las costas de este proceso legítimamente hechas, cuya tasación en mí reservo.Esta sentencia fue dada por Diego de Valcazar, Provisor de la Provincia de León, en la Prisión del Prior, a 24 de marzo de 1576. Ante el escribano Alonso Esteban. Por tanto, un año llevó la resolución del pleito.

Por Javier Serrano Pinteño.

Revista de feria 1997

martes, 12 de enero de 2010

BALANCE DE LA NEVADA

POCO A POCO LLEGA LA NORMALIDAD EN LA SIERRA NORTE

Con la tempestad llegó la calma. La lluvia que cayó en la noche del domingo al lunes en la comarca de la Sierra Norte derritió la nieve tan esperada para atraer a los turistas, pero también tan copiosa que se convirtió en una jaula para los curiosos que se acercaron a Guadalcanal, Alanís de la Sierra o Cazalla de la Sierra.
Así quedaron atrapados por una nevada "histórica, como no recuerdan ni los más mayores del pueblo", tal y como dijo el alcalde de Cazalla, Carmelo Conde (PSOE), después de comprobar que el frío dejó hasta 30 centímetros de nieve y más de 500 coches tirados en la entrada -o mejor salida- de la Sierra Norte: la carretera A-392 hacia El Pedroso y Cantillana.
Cuatro horas quedó cortada la carretera, pero la llegada de la infantería -la Consejería de Obras Públicas movilizó seis máquinas quitanieves, doce personas y repartió 7.500 kilos de sal- permitió liberar esta vía sobre las 19.00 horas del domingo. "Los vehículos salieron, pero preocupados por las placas de hielo", señaló el regidor, que habilitó como albergues una residencia escolar, donde se alojaron seis personas, y la biblioteca, que no se utilizó.
Peor suerte corrieron en Alanís de la Sierra, donde más de 600 turistas se vieron en la obligación de pasar la noche, después de que se quedaran en el camino a casa sus más de 200 coches. Su alcalde, Cecilio Fuentes (PA), confesó que la situación fue crítica. Entre los propios vecinos, que alojaron a los turistas en sus casas, y las casas rurales, destino de otros, se alojó al grueso de los atrapados. Sólo quedaron 120 personas, que fueron ubicadas en espacios públicos como el gimnasio y dos aulas anexas al colegio público. En esa locura, el Ayuntamiento también se puso manos a la obra y liberó una carretera, la que une Alanís con San Nicolás del Puerto, y donde habían quedado atrapados unos 70 vehículos. "A la tarde ya llegaron los vehículos de la Junta", añadió, no sin antes puntualizar que hubo momentos en los que "no se sabía exactamente cómo actuar".
La jaula fue más pequeña en Guadalcanal, donde sólo quedaron atrapadas 25 personas. "Las lluvias y el sol dejaron transitables todas las carreteras, pero el domingo era otra cosa", aclaró el alcalde de Guadalcanal, Jesús Manuel Martínez (PP), que reconoció "el colapso", sobre todo durante "las seis horas de intensa nevada". Aunque agradeció la colaboración de la Junta de Andalucía, la Diputación y la Guardia Civil, que hicieron "un trabajo encomiable", también aclaró que tuvieron que "llamar a empresas privadas del pueblo, que tienen retroexcavadoras, para liberar de nieve el camino hasta el puerto de Llerena", de las principales vías de acceso del municipio y la salida al hospital más cercano.
La normalidad llegó ayer también a Constantina, después de que "la nieve se haya ido de las calles tras la llovizna de la noche". Pero, al igual que en sus vecinos, acogió a familias que "por miedo a encontrarse las carreteras en mal estado se quedaron en hoteles y casas rurales del pueblo".
coordinación. Tras la nevada, es la hora de hacer balance y evaluar los daños. Los alcaldes de los municipios afectados coincidieron en calificar de "imprevisible" una nevada de cuatro horas y con esa intensidad. Pero también indicaron que sería recomendable aunar criterios y fijar planes de emergencias comarcales y no sólo en cada municipio. Para ello, se han emplazado en una próxima reunión en la que también quieren que esté la Diputación de Sevilla, para que "sea la coordinadora de todo el plan", según precisaron los regidores tanto de Alanís de la Sierra como de Guadalcanal.
Es más, aseguran que será fácil el entendimiento. "Durante la nevada teníamos contactos entre los alcaldes cada minuto", indicó Cecilio Fuentes, que vio lógica esa coordinación ya que "hay carreteras comunes" y, además, "tendríamos que tomar como experiencia lo que nos ha pasado y evitar en lo posible que esto se vuelva a repetir en años venideros".
Fuentes.-Europa Press

domingo, 10 de enero de 2010

PROBLEMAS DE ACCESOS EN GUADALCANAL

EL ABANDONO DE LA SIERRA NORTE

Los Ayuntamientos se quejan de que no tienen medios para "restablecer la normalidad" y evacuar todos los coches de la nieve
Los municipios sevillanos de Alanís de la Sierra y Guadalcanal permanecen todavía incomunicados por el corte de carreteras, si bien en el primer municipio se consiguieron rescatar esta tarde unos 80 vehículos mientras que en Guadalcanal transitaron 500 vehículos que se encontraban atrapados por la nieve.
En declaraciones a Europa Press, el alcalde de Alanís, Cecilio Fuentes (PA), manifestó que su municipio sigue incomunicado, pues "todas las carreteras de acceso están cortadas" y, aunque no todos, ya se consiguieron evacuar unos 80 vehículos que estaban en la carretera que va al municipio vecino de San Nicolás del Puerto.
Así, hizo hincapié en que unos 120 vehículos continúan atrapados y sus ocupantes "están preocupados porque mañana no podrán ir al trabajo y al colegio los niños", y es que, "por lo menos hasta mañana no se van a resolver las comunicaciones".
En este sentido, señaló que en el municipio se ha establecido un dispositivo de "urgencias médicas", por parte del Servicio Andaluz de Salud (SAS), que consiste en que un médico acuda acompañado por la Policía Local al domicilio de la persona que requiera de su asistencia en caso de que se produzca algún tipo de incidencia mientras que se restablecen las comunicaciones.
Por su parte, el alcalde de Guadalcanal, Jesús Manuel Martínez (PP), expresó a Europa Press que la localidad permanece también incomunicada ya que siguen todos los accesos cortados por el puerto de Gerena y la carretera de Alanís y de Cazalla, apuntó.
Asimismo, en este municipio se está llevando a cabo el mismo un "procedimiento sanitario" parecido al de Alanís, pues la Policía Local "trasladaría al enfermo al ambulatorio", ya que los accesos por las calles son "complicados", apostilló.
Además, Martínez indicó que a esta hora del día siguen sin tener noticia alguna por parte de la Junta de Andalucía y de Diputación, instituciones competentes en las carreteras, y es que, dijo, "aunque somos pueblos pequeños, estamos sufriendo una situación de emergencia, que se habría solucionado solo con un máquina quitanieves".

La Sierra Norte amanece con una capa de nieve que el sol se apresuró en derretir.

Aunque tarde o temprano el frío llega todos los años no siempre lo hace acompañado del manto blanco de nieve con el que amanecía ayer la Sierra Norte de Sevilla. Tras la nevada de la noche del jueves, municipios como Alanís de la Sierra y Guadalcanal se levantaban teñidos de blanco y recordando que hacía tres años que no nevaba así. Comenzó a caer a las seis de la tarde y no paró por lo menos hasta las diez de la noche, recordaba José Antonio Spínola, dueño de un gimnasio en Alanís, que "hoy [por ayer] no he abierto, es que no se podía del frío que hacía", decía.
Muchos vecinos se afanaban en retirar la nieve de sus coches mientras alguna que otra máquina lo hacía de las calles, si bien en la tarea se le adelantaban los rayos de un sol radiante que en contraste con el día anterior lució desde primeras horas de la mañana. Ese sol fue suficiente para que, aunque la nieve cuajara durante la noche, apenas los tejados y algunos restos en las zonas sombrías permaneciera ayer con nieve y sólo en los puntos más altos como el castillo del municipio. Donde la imagen si fue de postal navideña durante prácticamente toda la jornada fue en Guadalcanal. A mayor altura que el vecino municipio, sus campos de olivos lucían cubiertos de nieve y aunque el termómetro marcaba entre 0 y 1 grado, el viento que azotaba hacía que la sensación térmica fuera de temperaturas bajo cero. Ese frío era el que reservaba a los vecinos al calor del hogar.
Desde el mirador de la localidad, ya cerca de la Capitana -uno de los puntos más altos de la provincia a 960 metros sobre el nivel del mar- la nieve aún se conservaba y con ella la esperanza de la llegada de turistas durante el fin de semana.
"La previsión es que nieve de nuevo el domingo", explicaba el alcalde de la localidad, Jesús Manuel Martínez (PP), que recordaba además que, la nieve no había provocado incidencias reseñables. "Hemos dejado incluso unos días más la iluminación de Navidad para que esto luzca más bonito", aseveraba el regidor con las esperanzas puestas ahora a que el señor del tiempo no se equivoque con su predicción para el fin de semana.
Mientras, en la zona, los vecinos encaran el frío, de la mejor manera posible: con las "candelas y braseros" de toda la vida.
Mientras, en la zona, los vecinos encaran el frío, de la mejor manera posible: con las "candelas y braseros" de toda la vida.

sábado, 9 de enero de 2010

PENSAMIENTO LÚDICO


Bocas de ira.
Ojos de acecho.
Perros aullando.
Perros y perros.
Todo baldío.
Todo reseco.
Cuerpos y campos,
cuerpos y cuerpos.
¡Qué mal camino,
qué ceniciento
corazón tuyo,
fértil y tierno!
2010 Centenario del Nacimiento de Miguel Hernández

Este año que acaba de comenzar, si las trifulcas entre sus herederos y las instituciones no lo impiden, conmemoraremos el primer centenario del nacimiento de Miguel Hernández. Desde luego, si todos los actos van a ser como el de esa empresa norteamericana, de cuyo nombre no me da la gana acordarme, que pretende enviar a la luna un ejemplar de Perito en lunas, apaga y vámonos; que para esa patochada, no hacían falta esas alforjas. No obstante, creo que la fuerza de la poesía de Miguel Hernández es tal que resistirá todos los homenajes (hasta los más desafortunados).
Uno siempre ha sido más partidario de los homenajes íntimos que de los de traca y mascletà. Por eso quiero proponer para Miguel Hernández el homenaje más sencillo y, al cabo, más fructífero: el de leer sus poemas en soledad; que la poesía, como dice Francisco Brines, no tiene público, tiene lectores. Y juntamente con la lectura de sus poemas, quiero recomendar la biografía del poeta escrita por José Luis Ferris: Miguel Hernández. Pasiones, cárcel y muerte de un poeta (Ed. Temas de hoy). Aúna José Luis Ferris la erudición bien entendida y una prosa que atrapa al lector desde las primeras líneas. Es un libro muy interesante porque desmonta bastantes tópicos como, por ejemplo, el del poeta autodidacta.
Miguel Hernández tuvo una escolaridad mucho más extensa e intensa de lo que el extendido tópico le atribuye. Fueron casi 10 años de escolaridad, parte de los cuales corresponden a la sólida formación que recibió con los jesuitas. Otra cosa es que él, además, fuera un voraz lector y complementara por su cuenta su formación.
Al mismo tiempo, en el libro de Ferris algunos poetas “compañeros” de Miguel Hernández no quedan bien parados. Es el caso, por ejemplo, de García Lorca o de Rafael Alberti. García Lorca tuvo celos de la fama que iba adquiriendo el poeta de Orihuela. Cuenta Ferris que un día Lorca tenía la intención de ir a casa de Vicente Aleixandre para leerle su última obra, La casa de Bernarda Alba. Al enterarse de que en esos momentos estaba allí Miguel Hernández, le dijo al bueno de Aleixandre que con Miguel allí, él no acudiría. “Entonces, qué puedo hacer yo”, le dijo Aleixandre. “Échalo”, contestó secamente Federico. Aleixandre, que era bueno y generoso a carta cabal, no echó a Miguel. Por su parte, el enfrentamiento con Alberti es más que lógico. En los trágicos episodios de la Guerra Civil, quien pasó frío, hambre, sueño, miedo y demás penalidades en el frente de Andalucía, en el de Teruel (donde conocería la noticia del nacimiento de su primer hijo en las Navidades del 37) y en el de Madrid fue Miguel Hernández. Alberti, León Felipe y otros iban al frente de visita, pero por la tarde regresaban a Madrid. Y algunos, ni eso. En una ocasión Miguel Hernández ya no pudo más. En el edificio de la Alianza Antifascista estaban celebrando poco menos que un banquete. Miguel se dirigió a Rafael Alberti y le recriminó: “Aquí hay mucha puta y mucho hijo de puta”. Alberti le dijo que, si se atrevía, que lo dijera más alto. Y Miguel, ni corto ni perezoso, lo escribió en una pizarra que había allí. Mª Teresa León, compañera de Alberti, se sintió directamente aludida, pues ella se había encargado personalmente de organizar la fiesta, y le arreó un tremendo bofetón. Lean también, por favor, quién realmente removió Roma con Santiago para conseguir la libertad de Miguel Hernández y quiénes han pretendido colgarse esa medalla: al César lo que es del César y a José María de Cossío lo que es de José María de Cossío. Y a quienes han leído la última novela de Manuel Vicent, León de ojos verdes, les interesará saber que en el hospital de campaña de Benicassim se conocieron Miguel Hernández y Antonio Buero Vallejo, que estaba allí destinado en labores sanitarias. Años más tarde Buero Vallejo fue quien realizó el famoso retrato del poeta cuando ambos compartieron celda en la cárcel madrileña de Conde de Toreno. Rindamos, pues, homenaje a Miguel Hernández en voz baja, sin hacer mucho ruido. Creo que se corresponde mejor con su drama vital y con su forma de ser.




Rafael Candelario Repisa

viernes, 8 de enero de 2010

JUAN DE SILVA Y PANTOJA 2/2






RESPUESTAS A UN DESPACHO DE JUAN DE SILVA Y PANTOJA DE 10 DE OCTUBRE DE 1797, SIENDO REY CARLOS IV.

Se llama Guadalcanal, es villa de Jurisdicción Ordinaria, y tiene a la distancia de dos leguas una aldea pedanía llamada Malcocinado.Dista de la ciudad de Llerena, cabeza de su partido, cuatro leguas y de la capital de Badajoz de esta provincia, veinte y dos, y de la corte de Madrid, sesenta y cinco.La citada villa es territorio de la Orden de Santiago.Tiene setecientas casa útiles y dieciocho arruinadas.Las casas Consistoriales se hallan demolidas, hay una pieza que sirve de cárcel pública, un real pósito, una carnicería, un matadero, 47 molinos sepan: 13 de aceite y 34 de zumaque, 3 tenerías, cuatro puestos de venta de aceites por menor y cuatro de vinos y aguardientes que los ponen los abastecedores de esta especie, 3 posadas o mesones.Hay dos Hospitales, uno de los pobres transeúntes, llamado de Santiago a cargo de su mayordomo D. Ramón García y otro de enfermos, titulado la Caridad, a cargo de su mayordomo D. Bartolomé Olmedo y en donde habita una enfermera, y en la actualidad no hay enfermos en él, siendo el número de expósitos que se están criando a cargo de sus respectivos amos, de 14.No hay en este pueblo colegio de educación para la industria y artes.En esta villa hay tres escuelas de primeras letras, a cargo de tres maestros, siendo el número de niños que se enseñan de doscientos, hay cinco maestras que enseñan niñas a coser y el número de estas es de 160.No hay en esta villa Universidad alguna y sólo un estudio de Gramática en el convento de religiosas de San Francisco, extramuros de ella, que su lector o preceptor es un religioso, cuyo estudio es fundación, que hizo D. Nicolás de Ortega y Toledo, siendo el número de estudiantes el de 24.Hay en esta villa 406 varones y 399 hembras hasta 7 años, 390 varones y 286 hembras de 7 a 16, 186 varones y 169 hembras de 16 a 25 años, y de esta edad 70 casados y 71 casadas y una viuda, de 25 a 40 años, 68 varones y 44 hembras solteros, 368 casados y 360 casadas, 10 viudos y 14 viudas, de 40 a 50 años, 30 varones y 24 hembras solteros, 146 casados y 136 casadas, 24 viudos y 29 viudas, de 50 a 60, 25 varones y 49 hembras solteros, 36 casados y 38 casadas, 36 viudos y 66 viudas; de 60 a 70, 13 varones y 10 hembras solteros, 6 casados y cinco casadas, 22 viudos y 50 viudas; de 70 a 80, 4 varones y dos hembras solteros, 6 casados y cinco casadas, 5 viudos y 4 viudas; de 80 a 90, un viudo y tres viudas, de 90 a 100 un varón soltero y una viuda; de 100 arriba ninguno.En esta villa hay tres parroquias y por consiguiente tres curas y tres tenientes de estos, 37 capellanes, tres insacris y uno de ellos a título de Patrimonio, cuatro de menores y cinco sacristanes, nueve acólitos, ocho ermitas, cinco fuera de la población y tres dentro de ella y no hay catedrales, colegiatas ni beneficiados.En esta villa hay extramuros un Convento de Religiosos Franciscanos de la Provincia de los Ángeles y en él 19 religiosos de misa, 13 profesos, 5 legos, 4 donados y 4 sirvientes, dentro de la población, 3 conventos de religiosas, uno sujeto al provincial de los Ángeles, y los dos al ordinario de esta provincia de León, en ellos hay 34 religiosas de velo negro, 10 legos, 1 novicia y 3 sirvientes.No hay dependiente alguno de Cruzada y sí dos de la Inquisición un Síndico de San Francisco.En la milicia y el ejército hay 70 personas.Hay en esta villa 6 títulos y mayorazgos, 25 nobles o hidalgos y 4 dependientes de rentas.Hay en esta villa 4 escribanos, 3 procuradores, dos abogados, 1 alguacil y dos ministros ordinarios.Hay dos médicos, dos boticarios, un cirujano, 4 albeitares y herradores.Hay 4 mercaderes con sus respectivas tiendas y no hay comerciantes.Hay 150 labradores propietarios, 470 jornaleros, incluidos los criados de labranza, hay 56 ganaderos, hay 100 pastores.Cazadores 3.Cocineros 1.Cerrajeros 5 y herreros 4.Hay 5 sastres, 27 zapateros, un curtidor y un zurrador, dos boteros, cinco chocolateros, incluidos dos oficiales, 12 tejedores de lienzos y ropas de lino. hay un fabricante de jabón. Hay 50 artesanos (barberos, albañiles, molineros, tejeros y ladrilleros), 7 carpinteros, un tallista y un cestero de esparto. Hay dos cereros, cuatro taberneros, cuatro fábricas de aguardientes.Hay 30 criados domésticos (mozos de mulos y otros destinados al servicio de sus amos en el despacho y ventas de sus vinos).



Publicado sin autor en la página “Guadalcanal Noticias” el 29/09/05


Rafael Candelario Repisa

lunes, 4 de enero de 2010

PENSAMIENTO LÚDICO







ESTE AÑO HE SIDO BUENO


Ya terminó la Navidad y Noche Vieja 2009, pero nos queda la Noche de Reyes, la maravillosa noche de toda la vida de los niños españoles, entre tanto rom pom pom, discursos del de la reina y yo y gorritos para hacer el merluzo y coger la merluza y las uvas que se te atragantan, hay noticias que le alegran a uno la vida, que le reconcilian con el pasado.
He leído que Papá Noel no es una buena influencia para nuestros niños, han tenido que ser unos científicos con sus pruebas los que nos convenzan y desesmacaren al impostor. Nathan Grills y Brendan Halyday, dos científicos australianos, que también es gana de celebrar estos días en bañador allá por las antípodas, aseguran que el gordinflón montado en trineo “promueve la obesidad, el exceso de alcohol al volante y, en general, un estilo de vida poco saludable”. Y, aunque no lo digan los cerebritos australianos, yo añado que fomenta el maltrato a los animales y la tala de árboles.
No se dejen cegar por las tradiciones importadas por los cortes ingleses y otros mercaderes. Aténganse a los hechos: un tío gordo como un cochino, que ya sale soplado de casa como delatan sus napias coloradas, a las tres o las cuatro de la mañana le da por despertar a los renos e irse de copas por el mundo. El menda, como va pedo, no entra a las casas por la puerta, sino que se mete por las chimeneas y se pimpla todas las botellas de coñac, Don Simón, San Miguel, Fra Angélico o Dom Pérignon, que ha obligado a los niños a dejarle al pie de un árbol talado que en cuatro días habrá que tirar a la basura y para los renos ni agua.
¿Y qué hacen nuestras autoridades y nuestra policía urbana y nuestra guardia civil de tráfico? Nada, un tío borracho circulando a las cuatro de la mañana a toda leche en un trineo tirado por renos y sin nadie que le haga la prueba de alcoholemia. Y últimamente, con las nuevas modas de nuestros jóvenes, el gordinflón se apunta a todos los botellones que se encuentra en sus escapadas por los parques de pueblos y ciudades de todo el mundo.
Dicen estas eminencias de la ciencia, que han publicado sus hallazgos en el British Medical Journal, que Papa Noel “transmite un mensaje en el que se relaciona la obesidad con la felicidad y la jovialidad". Y eso no es así sino que "es realmente importante que las personas que los niños admiran y que son sus modelos a seguir estén en buena forma, coman bien y hagan ejercicio”.
“Es absolutamente necesario", repito que este admirado gordinflón, promueva el ¡No a tala de abetos para llenarlos de bolitas y guirnaldas horteras! ¡El no al maltrato a los animales!, ¡El si bebes no conduzcas!
Que no se me mal interprete, yo contra Papa Noel y otras costumbres foráneas no tengo nada en contra, pero ya estoy harto de importaciones de fiestas y costumbres impuestas, así que aprovechando que estoy en mi pueblo, veré la maravillosa cabalgata de Reyes Magos y por la noche dejaré mis zapatos, una botella del Claver (del dulce), higos secos, polvorones y para los camellos agua y cebada por supuesto, igual me dejan muchas cosas, este año he sido bueno.

Rafael Candelario Repisa